Más de 11 millones de fieles visitan la Basílica con cifras récord de gasto
La peregrinación guadalupana 2024 atrae a millones y se reporta sin incidentes, mientras crecen las expectativas de gasto.
12/12/20242 min read


Cada 12 de diciembre, miles de peregrinos se dirigen a la Basílica de Guadalupe, un evento que simboliza la devoción y unidad de millones de mexicanos. En este 2024, se espera que más de 11 millones de fieles visiten el santuario de la Virgen de Guadalupe, en uno de los mayores despliegues de fervor religioso. Las autoridades han activado un operativo de seguridad que abarca desde las entradas a la Basílica hasta las principales arterias de la Ciudad de México. Afortunadamente, el reporte es positivo: el saldo ha sido blanco, sin incidentes graves, gracias a la colaboración de distintas dependencias de seguridad, bomberos y personal médico.
En cuanto a la salud, el operativo también ha ofrecido atención médica a los peregrinos, quienes en su mayoría llegan a pie o en grupo, algunos de ellos con niños o personas con discapacidad. Se han habilitado varios puntos de atención médica para garantizar que todos los peregrinos reciban atención en caso de algún inconveniente. En total, se han prestado más de 16 mil servicios médicos a los asistentes, ayudando a mantener la integridad física de los fieles.
Además del aspecto religioso y de seguridad, el Día de la Virgen de Guadalupe tiene una relevancia económica significativa. Las autoridades calculan que la llegada de tantos peregrinos genera una derrama económica superior a los 20 mil millones de pesos, lo que convierte a esta festividad en un motor económico importante para la Ciudad de México y sus alrededores. Comerciantes, restaurantes, hoteles y otros negocios en la zona se benefician de este flujo masivo de visitantes, quienes además contribuyen con sus donativos a las obras de la Basílica.
Las autoridades locales también han resaltado la importancia de este evento como un espacio de convivencia y respeto. A pesar de la gran afluencia de personas, el evento transcurrió de manera ordenada, y la comunidad ha podido disfrutar de una jornada de fe sin altercados. Las celebraciones de este 12 de diciembre demuestran que, a pesar de los retos sociales y económicos, la devoción y la esperanza continúan siendo el motor de la comunidad mexicana.