El salario mínimo sube, pero tu sueldo podría no hacerlo

Los aumentos al salario mínimo benefician directamente a quienes lo ganan, sin ajustes obligatorios para otros ingresos mayores.

12/17/20242 min read

El aumento del salario mínimo en México, que entrará en vigor el 1 de enero de 2025, ha generado diversas preguntas entre los trabajadores. A partir de esa fecha, el salario mínimo diario será de 278.80 pesos en la mayor parte del país y de 419.88 pesos en la Zona Libre de la Frontera Norte, según lo anunciado por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami).

Sin embargo, muchos empleados se han preguntado por qué, a pesar de este incremento, sus sueldos permanecen sin ajustes. La respuesta radica en que el salario mínimo representa el monto mínimo que las empresas deben pagar a sus trabajadores. Es un piso obligatorio, no un parámetro general para modificar las remuneraciones de quienes perciben ingresos superiores a este nivel.

Carlos Ferrán Martínez, socio director de Ferrán Martínez y Abogados, explica que el salario mínimo establece un estándar para asegurar el bienestar básico, pero no exige ajustes automáticos para todos los salarios. A pesar de los aumentos recientes, esto no significa que las empresas deban elevar proporcionalmente los sueldos de todos sus empleados.

Por su parte, Diego García Saucedo, socio director de García Velázquez, detalla que este ajuste impacta directamente solo a quienes ganan exactamente el salario mínimo. Las personas con ingresos superiores dependerán de las políticas internas de las empresas y de negociaciones individuales o colectivas para obtener incrementos salariales.

Además, no existe una obligación legal que exija a los empleadores incrementar sueldos en proporción al salario mínimo. Sin embargo, algunas empresas socialmente responsables optan por hacer ajustes para mantener la motivación y el poder adquisitivo de sus trabajadores, especialmente en un contexto de inflación creciente.

En este sentido, el aumento del salario mínimo beneficia principalmente a quienes perciben el monto base. Para el resto de los empleados, cualquier mejora dependerá de las dinámicas propias de cada empresa. Comprender esta diferencia resulta crucial para evitar falsas expectativas sobre los efectos de los cambios en el salario mínimo.