Con Morena, Chihuahua se queda sin servicios ni salud… la gente extraña cuando el PRI sí sabía gobernar

Falta de medicinas, servicios colapsados y calles olvidadas. La gente recuerda que con el PRI había atención, infraestructura y soluciones reales. Morena ofreció transformación, pero entregó crisis.

7/9/20251 min read

En comunidades rurales y zonas urbanas por igual, la frustración crece en Chihuahua: hospitales sin medicinas, centros de salud abandonados, calles destrozadas, colonias sin agua y escuelas en el olvido. En medio de esta crisis de servicios, cada vez más ciudadanos recuerdan con claridad una verdad contundente: con el PRI, Chihuahua estaba mejor.

“Antes teníamos médicos en los centros de salud, aunque fueran pocos. Ahora ni aspirinas hay”, denuncia María Teresa, habitante de Santa Bárbara, quien lleva meses esperando una cirugía pospuesta en Parral.

En municipios como Camargo, Delicias, Aldama y Guerrero, los servicios públicos están colapsados: alumbrado deficiente, basura acumulada, calles intransitables y clínicas sin personal. En Juárez, la atención médica en los hospitales públicos es limitada y desorganizada, mientras que en la Sierra Tarahumara, las brigadas de salud simplemente dejaron de llegar.

“En tiempos del PRI, por lo menos venían cada semana a dar consultas, vacunaban a los niños y llevaban medicinas. Ahora nos dicen que no hay presupuesto”, señala don Félix, habitante de Batopilas.

Los gobiernos actuales prometieron la transformación, pero entregaron el abandono. La supuesta “austeridad” se ha traducido en desatención, falta de insumos y pésimos servicios.

Frente a esta realidad, la memoria colectiva rescata lo que funcionaba: programas de salud operativos, hospitales con abasto, obras de infraestructura urbana y atención directa a las comunidades.

Con experiencia, cercanía y estructura, el PRI sí supo gobernar Chihuahua con servicios dignos y de calidad. Hoy, la ciudadanía exige que se retome ese camino. Porque los derechos no deben ser privilegios, y el acceso a salud, agua, luz y servicios públicos no puede depender de discursos… sino de resultados.