Alejandro Moreno desenmascara a Morena: el narco, el comunismo y la traición a México

9/3/20252 min read

Lo que ocurrió en la Cámara de Diputados con Alejandro Moreno Cárdenas no fue un discurso más. Fue un acto de valentía en un país que hoy sufre las consecuencias de un gobierno federal sometido al crimen organizado y obsesionado con destruir las instituciones que tanto costaron construir. Moreno, presidente nacional del PRI, dijo lo que millones de mexicanos piensan y sienten: Morena no es un partido político, es un cartel disfrazado de movimiento.

Durante 18 minutos, interrumpidos por gritos, reclamos y hasta intentos de censura, Alejandro Moreno desenmascaró a la llamada “Cuarta Transformación”. Les dijo en la cara lo que nadie dentro de su movimiento se atreve a admitir: que han pactado con los criminales, que su estrategia de seguridad no solo fracasó, sino que convirtió al Estado en cómplice de los mismos grupos que asesinan, extorsionan y secuestran a la gente en cada rincón del país. Y ante esa verdad incómoda, los legisladores de Morena respondieron con lo único que saben hacer: aplaudir al líder que los controla y gritar consignas huecas.

Moreno fue claro y contundente: “no permitiremos una narcodictadura terrorista comunista, así nos cueste la vida”. Esta no es una frase grandilocuente ni una simple provocación. Es un llamado de alerta a toda la nación y, sobre todo, a la comunidad internacional. México está en riesgo de convertirse en lo que hoy es Venezuela: un país devastado, sin libertades, sometido a la miseria y a los caprichos de un régimen que se perpetúa en el poder a través del miedo y la violencia.

Morena quiere destruir la democracia, el equilibrio de poderes y la transparencia que fueron construidos con décadas de esfuerzo. Lo hacen minando a las instituciones, debilitando al Poder Judicial, acosando a la prensa crítica y persiguiendo a la oposición. Lo hacen sometiendo al país a una política exterior débil que ni siquiera es capaz de defender a los productores nacionales de los aranceles injustos que hoy golpean nuestra economía. Lo hacen desmantelando el sistema de salud, que en estados como San Luis Potosí ya ni siquiera tiene medicamentos básicos para atender a los enfermos.

La verdad es dura, pero debe decirse: Morena no gobierna para la gente, gobierna para el crimen. Y Alejandro Moreno, con todas las críticas que pueda recibir, tuvo el valor de enfrentarlos en el Congreso y señalar lo que todos vemos: México está en peligro. No se trata de un debate entre partidos, se trata de la defensa de la nación. Y si algo quedó claro en esa sesión, es que el PRI seguirá siendo la voz que diga lo que el oficialismo pretende silenciar. Porque si callamos hoy, mañana será demasiado tarde.