Alejandro Moreno desde Bolivia: La elección popular de jueces es una “receta fracasada” que vulneró la justicia y la democracia
El líder del PRI alertó sobre el riesgo que corre México con la propuesta de Morena, citando el caso boliviano, donde la politización de las cortes resultó en un histórico nivel de votos nulos.
10/22/20251 min read


El Presidente Nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, aprovechó su estancia internacional en Bolivia para lanzar una contundente advertencia a la nación sobre los peligros de implementar la elección popular de jueces, tal como lo propone Morena en México. En un ejercicio de derecho comparado, Moreno Cárdenas señaló directamente el modelo boliviano, donde las altas cortes de justicia son elegidas por voto directo desde 2011, como el ejemplo más claro de una “receta fracasada” que no mejoró la justicia, sino que la politizó y socavó su independencia.
El líder priista se refirió a las graves consecuencias que se observaron en los procesos electorales judiciales de Bolivia, particularmente en 2017, donde la falta de conocimiento de los candidatos por parte de la ciudadanía y la politización del proceso de preselección generaron un histórico y abrumador voto nulo o blanco, que superó el 60%. Alejandro Moreno enfatizó que este porcentaje de rechazo es una prueba innegable de la desconfianza ciudadana hacia un sistema que, bajo la promesa de democratizar la justicia, facilitó la captura del Poder Judicial y el nombramiento de personas afines al partido gobernante de aquel país.
Moreno Cárdenas puntualizó que el caso de Bolivia es la evidencia más palpable de que la elección directa no garantiza la idoneidad ni la independencia de los impartidores de justicia, sino que, por el contrario, rompe la carrera judicial como mecanismo técnico y eficaz de selección. La consecuencia directa, advirtió, ha sido un sistema judicial cuestionado por su falta de imparcialidad y que, según reportes internacionales, sigue estando entre los peores del mundo. El líder del PRI concluyó su comparativa alertando que México no puede arriesgar la estabilidad de su sistema de contrapesos siguiendo el camino de un modelo que, lejos de sanar la justicia, vulneró su legitimidad y la sometió a intereses político-partidarios.
